martes, 15 de diciembre de 2009

Evangelio Martes 15-12-09 Mateo 21,28-32

En aquel tiempo, Jesús dijo a los sumos sacerdotes y a los ancianos del pueblo:
"Qué opinan de esto? Un hombre que tenía dos hijos fue a ver al primero y le ordenó:
"Hijo, ve a trabajar hoy en la viña". El le contestó: "Ya voy, señor", pero no fue. El padre se dirigió al segundo y le dijo lo mismo. Este le respondió:
"No quiero ir", pero se arrepintió y fue. ¿Cuál de los dos hizo la voluntad del padre?"
Ellos le respondieron:
"El segundo".
Entonces Jesús les dijo:
"Yo les aseguro que los publicanos y las prostitutas se les han adelantado en el camino del Reino de Dios. Porque vino a ustedes Juan, predicó el camino de la justicia y no le creyeron; en cambio, los publicanos y las prostitutas sí le creyeron; ustedes, ni siquiera después de haber visto, se han arrepentido ni han creído en él".
Palabra del Señor.

Reflexión

Debido a nuestra naturaleza débil, fragmentada por el pecado, nuestra vida se va desarrollando en un clima de infidelidad: Infidelidad a Dios, infidelidad a nuestros principios, infidelidad a los demás y hasta a nosotros mismos. Sin embargo, Dios nos conoce y sobre todo nos ama y por ello continuamente nos ofrece su amor y su perdón. La historia de Israel nos muestra que a pesar de nuestra rebeldía Dios no se cansa de esperar, pues quiere hacer de nosotros un pueblo de “labios puros, que invoque al Señor y lo sirva”. Aprovechemos, pues, esta nueva oportunidad que Dios nos brinda durante el tiempo de Adviento para progresar en nuestro camino de conversión. El sacramento de la Reconciliación es el mejor modo de regresar al Señor y así presentarnos dignamente como parte del “Pueblo de Dios”. Si verdaderamente quieres vivir en paz y experimentar la felicidad que no se acaba, abre tu corazón a Jesús.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Escribenos!!